El 66% de los argentinos que son padres separados, vive con sus hijos @trabajando.com @commsultingpr

 El rol de los hombres ha cambiado, hoy no sólo son quienes aportan el dinero a la familia, sino que además, desarrollan relaciones más afectivas y cercanas con sus seres queridos, tarea difícil cuando se piensa en la dificultad de mantener un trabajo, con buena paga y además que le entregue tiempo para compartir con quienes quieren. Pero, ¿qué pasa cuando son padres separados y éstos tienen que esforzarse más de lo pensado para poder cumplir todos los roles que les exige la sociedad?

 

 

Se acerca el día del padre y Trabajando.com realizó una encuesta a más de 2.500 argentinos,  para saber qué opinan sobre la participación de ellos en el mercado laboral y en la vida personal con sus hijos.  El 17% resultaron ser padres solteros.

 

 

Lo ideal en la mayoría de los casos, es que los padres vivan con sus hijos bajo el mismo techo durante su crecimiento y aunque pudiéramos pensar que son mayores los casos en que tras una separación los hijos se quedan con la madre, según la encuesta realizada, esto no es así.

 

Un 66% de los argentinos aseguran que tras ser padre soltero, son ellos quienes viven junto a su(s) hijo(s), mientras que un 34% asegura lo contrario.

 

“Hay que tener clara la diferencia entre la calidad del tiempo que se pasa con los hijos y la cantidad; ya que estar presente no significa mirarse físicamente, estar presente significa saber del otro, poner atención y participar” asegura Pablo Molouny, gerente general de Trabajando.com Argentina.

Del 34% de los padres que no viven con sus hijos, un 43% los ve entre 1 y 3 días a la semana, un 23% cada 15 días, un 17% más de 5 días a la semana y un mismo porcentaje una vez por semana.

 

 

Hay veces que simplemente el dinero no alcanza, y así lo aseguró el 55% de los encuestados al preguntarle si lo que gana actualmente en su trabajo, le alcanza para pagar el día a día tanto de su hijo como de él mismo. Un 35% dice que le alcanza el sueldo, pero justo y finalmente un 10% dice que le alcanza, y que además, se puede dar sus gustos.

 

Si bien no es nada saludable confundir la virtud de trabajar arduamente con el laborar excesivamente, cuando el dinero no alcanza y se es padre separado, son variadas las alternativas para poder generar más dinero y una de esas son las conocidas horas extras de trabajo. ¿Será que la toman como opción? Un 42% asegura que no trabaja horas extras, un 23% dice que siempre, un 18% la mayoría de los días del mes y un 17% casi nunca.

 

Ser padre separado y no vivir con su(s) hijo(s) ha dejado de ser una situación excepcional para pasar a ser una bastante habitual, donde muchos aseguran que es solamente una cuestión de cumplimiento de objetivos diarios, y de organizar el tiempo y el dinero.

¿Creen los argentinos que viviendo con su(s) hijo(s) el dinero que ganan les rendiría mejor a ambos? Un 53% asegura que no, mientras que un 47% opina lo contrario.

 

“Trabajar y al mismo tiempo estar pensando el poco tiempo que comparten con los hijos, es una práctica que lleva a un mayor estrés y a un descenso de la productividad de las personas dentro de la empresa, porque, mientras desempeñan su trabajo, los trabajadores están inquietos por las funciones de asistencia que deben prestar a sus hijos y que no están pudiendo cumplir. Es necesario encontrar un equilibrio, ya que finalmente, si no se logra, ninguna de las dos tareas se cumplen correctamente” agrega Molouny.